top of page

RECONOCER PARA COMPRENDER MI ENFERMEDAD

ree

Cuando conocí a mi compañero de vida, era muy joven. Nuestro noviazgo fue corto porque quedé embarazada y tuvimos que vivir juntos. Al poco tiempo comenzó su alcoholismo, no le tomé importancia, pero durante el embarazo comencé a vivir los estragos de esta enfermedad, me comencé a llenar de odio y resentimiento hacia mi esposo. Cuando nació mi primera hija, descargué con ella lo que no podía hacer con mi enfermo, desafortunadamente todo lo quería resolver gritando. Lo anexé, anhelaba su “sobriedad”, pero al mismo tiempo no confiaba en que el pudiera sanar y continúe con mi mal carácter. Pasó el tiempo y un día después de llegar de su trabajo me platicó del programa de Al-Anon, me hizo entrar en razón, pues al analizar, estaba afectado a mi hija, la estaba quebrantando, así que tomé acción por primera vez. Recuerdo que lo primero que dije al entrar a la reunión fue: yo vengo por mi niña.

Descubrí que no iba solo por ella, también iba por mí, para sentirme bien. Aprendí que no puedo controlar otra cosa que no sea mi vida. Gracias a Al-anon y a mi Poder Superior ahora puedo decir que estoy plena y feliz. Mi felicidad ya no depende de la sobriedad de mi esposo, sino de mí. Entendí que el alcoholismo de mi esposo, no es mi culpa, ni mi responsabilidad, también supe que estaba gravemente afectada. Después de mucho tiempo estoy soltando las riendas a Dios, tomando el programa con serenidad, convirtiendo esa vida que alguna vez tuve y trabajando en ser una buena madre ahora de dos hijos. Al escribir mi historia, quiero que sepan que no estamos solas, siempre habrá un grupo de Al-Anon que nos espera y que todo pasa.

DISTRITO 4 Xalapa

 
 
bottom of page